Tesoro de la lengua y literatura castellana ó colección de piezas escogidas de autores clásicos de los mejores siglos: con notas críticas y literariasFrederico Fleischer, 1840 - 302 páginas |
Dentro del libro
Resultados 1-5 de 40
Página 12
... cielo , caminos estrechos , barrancos y derrumbaderos sin sa- ,, lida . Ellos gente suelta , plática en el campo , mostrada á 99 * ) No solamente las puertas & c . La conjunción sino presupone el adverbio solamente . ,, sufrir calor ...
... cielo , caminos estrechos , barrancos y derrumbaderos sin sa- ,, lida . Ellos gente suelta , plática en el campo , mostrada á 99 * ) No solamente las puertas & c . La conjunción sino presupone el adverbio solamente . ,, sufrir calor ...
Página 15
... cielo , que trataba de su libertad por mano de un mozo de linage real , que habia de ser bautizado y herege de su ley , porque en lo público profesaria la de los Cristianos . Dijo que esto concurria en Don Fernando , y concertaba con el ...
... cielo , que trataba de su libertad por mano de un mozo de linage real , que habia de ser bautizado y herege de su ley , porque en lo público profesaria la de los Cristianos . Dijo que esto concurria en Don Fernando , y concertaba con el ...
Página 53
... . Es á decir : fué venganza ó castigo del cielo & c . Sobre el uso particular del condicional en derramara véase la Gramática . ** ) Sin contar otros infinitos daños que hizo . el imperio de los Godos ? ¿ Quién se atreviera MARIANA . 53.
... . Es á decir : fué venganza ó castigo del cielo & c . Sobre el uso particular del condicional en derramara véase la Gramática . ** ) Sin contar otros infinitos daños que hizo . el imperio de los Godos ? ¿ Quién se atreviera MARIANA . 53.
Página 54
... cielo saludable , do soplan ordinariamente los vientos de poniente y mediodía , y entonces estaba sujeta y pertenecía á la Aquitania . Fortificó sus estan- cias de la otra parte del rio Loire , sobre que está edificada aquella ciudad ...
... cielo saludable , do soplan ordinariamente los vientos de poniente y mediodía , y entonces estaba sujeta y pertenecía á la Aquitania . Fortificó sus estan- cias de la otra parte del rio Loire , sobre que está edificada aquella ciudad ...
Página 70
... cielo para la salud de España . Á la verdad ellos fueron los que pusieron en su punto la justicia , ántes de su tiempo estragada y caida . Publicaron leyes muy buenas para el gobierno de los pueblos y para sentenciar los pleitos ...
... cielo para la salud de España . Á la verdad ellos fueron los que pusieron en su punto la justicia , ántes de su tiempo estragada y caida . Publicaron leyes muy buenas para el gobierno de los pueblos y para sentenciar los pleitos ...
Otras ediciones - Ver todas
Términos y frases comunes
Abenabó Abenhumeya adonde África Albaicin Alhambra Alpujarra aposento Argel armas Arnaldo Auristela bárbaros Boabdil buena caballero caballo Cadiar calle camino capitan cena cielo ciudad Cleofas cofrecillo Cojuelo comenzó compañía Constanza criados Cristianos daba debia decia decir dejó dellos demas despues desto diablo Diablo Cojuelo diciendo Diego dijo dinero dió dióle duque enemigos entender eran espada España esperanza esposa estaba fuese fullero gana gente gitanos gusto habia hablar hallé hermano hicieron hijos hizo huésped isla Jeniz lengua levantar llaman llegó llevaba macho mandó manos marques mirando Moros mozo mozuelo muerte muger mugeres mula mundo Nápoles noche ojos padre palabras parece pasado Periandro poco podia Poncio Pilatos Portugal preguntó priesa príncipe pude puerta puso quedó queria quiso quitar reino respondió Ricla rostro sacó salir Sigismunda soldados tambien tenia tierra traductor aleman traia Transila tuvo Venecia venia ventura vestido viendo vino visto volver Witiza
Pasajes populares
Página 261 - No lo puedo decir sin lágrimas" — lloraba como un niño el buen viejo acordándose de las veces que le habían bataneado las costillas — ; "porque no querrían que adonde están hubiese otros ladrones sino ellos y sus ministros; mas de todo nos libra la buena astucia.
Página 269 - Quede esto para los criados, que también han de comer: no lo queramos todo." ¡Mal te haga Dios y lo que has comido, lacerado, decía yo, que tal amenaza has hecho a mis tripas.
Página 291 - ... -¡Que no son aves! -dijo volviéndose a mí-. Mire V. Md. lo que es no saber. Déme los asadores, que no los quiero sino para esgrimir; que quizá le valdrá más lo que me viere hacer hoy que todo lo que ha ganado en su vida. En fin, los asadores estaban ocupados y hubimos de tomar dos cucharones. No se ha visto cosa tan digna de risa en el mundo. Daba un salto y decía: -Con este compás alcanzo más y gano los grados del perfil. Ahora me aprovecho del movimiento remiso para matar el natural....
Página 269 - ¡Mal te haga Dios y lo que has comido, lacerado, decía yo; que tal amenaza has hecho a mis tripas! Echó la bendición, y dijo: «Ea, demos lugar a los criados, y vayanse hasta las dos a hacer ejercicio, no les haga mal lo que han comido.
Página 269 - Cierto que no hay tal cosa como la olla, digan lo que dijeren; todo lo demás es vicio y gula." Acabando de decirlo echóse su escudilla a pechos, diciendo: "Todo esto es salud y otro tanto ingenio.
Página 265 - Llegó el día, y salí en un caballo ético y mustio, el cual, más de manco que de bien criado, iba haciendo reverencias. Las ancas eran de mona, muy sin cola; el pescuezo, de camello y más largo...
Página 273 - Mil veces topé yo sabandijas, palos y estopa de la que hilaba, en la olla, y todo lo metía para que hiciese presencia en las tripas y abultase.
Página 6 - ... adelante y estos reinos quedasen asegurados mientras fuese su voluntad. Siguiéronse luego ofensas en su ley, en las haciendas y en el uso de la vida, así cuanto...
Página 267 - ... desterrado; el gaznate, largo como avestruz, con una nuez tan salida, que parecía se iba a buscar de comer, forzada de la necesidad; los brazos, secos; las manos, como un manojo de sarmientos cada una.
Página 118 - Cuando los trabajos pasados se cuentan en prosperidades presentes, suele ser mayor el gusto que se recibe en contarlos, que fué el pesar que se recibió en sufrirlos; esto no podré decir de los mios, pues no los cuento fuera de la borrasca, sino en mitad de la tormenta.