Poesías selectas castellanas, desde el tiempo de Juan de Mena hasta nuestros dias, Volumen1Manuel José Quintana D.M. de Burgos, 1830 |
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Página xvi
... nieve é de frio ; E de ese rocío , E de grand helada . A la decida Di una corrida ; Fallé una serrana , Fermosa , lozana , E bien colorada . Dixe yo á ella , Homillome , bella , etc. Don Tomas Antonio Sanchez ha publicado las obras de ...
... nieve é de frio ; E de ese rocío , E de grand helada . A la decida Di una corrida ; Fallé una serrana , Fermosa , lozana , E bien colorada . Dixe yo á ella , Homillome , bella , etc. Don Tomas Antonio Sanchez ha publicado las obras de ...
Página lv
... diera verde lustre à tanta nieve . Del vulgo vil solicite la risa Siempre ocupado en fabulus de amoręs : Asi grandes pintores Manchan la tabla aprisa . A L " LUPE EGLOGA A CLAUDIO , い prolijas de lo mismo que ya ha dicho en LV.
... diera verde lustre à tanta nieve . Del vulgo vil solicite la risa Siempre ocupado en fabulus de amoręs : Asi grandes pintores Manchan la tabla aprisa . A L " LUPE EGLOGA A CLAUDIO , い prolijas de lo mismo que ya ha dicho en LV.
Página lxvii
... nieve Y al invierno tasar quieres el yelo ? Y antes que los desórdenes del vientre Satisfagan sus ímpetus violentos , Yermos han de quedar los elementos Para que el orbe en sus angustias entre . Al encontrar en sus obras estos pasages ...
... nieve Y al invierno tasar quieres el yelo ? Y antes que los desórdenes del vientre Satisfagan sus ímpetus violentos , Yermos han de quedar los elementos Para que el orbe en sus angustias entre . Al encontrar en sus obras estos pasages ...
Página 27
... nieve , Galatea ! Estoy muriendo , y aun la vida temo ; Témola con razon , pues tú me dejas , Que no hay sin tí el vivir para qué sea . Vergüenza he que me vea Ninguno en tal estado De tí desamparado ; Y aun de mí mismo yo me corro ...
... nieve , Galatea ! Estoy muriendo , y aun la vida temo ; Témola con razon , pues tú me dejas , Que no hay sin tí el vivir para qué sea . Vergüenza he que me vea Ninguno en tal estado De tí desamparado ; Y aun de mí mismo yo me corro ...
Página 71
... nieve Dios ; y el trueno donde viene . ¿ No ves cuando acontece Turbarse el ayre todo en el verano ? El dia se ennegrece , Sopla el gallego insano , Y sube hasta el cielo el polvo vano : Y entre las nubes mueve Su carro Dios ligero y ...
... nieve Dios ; y el trueno donde viene . ¿ No ves cuando acontece Turbarse el ayre todo en el verano ? El dia se ennegrece , Sopla el gallego insano , Y sube hasta el cielo el polvo vano : Y entre las nubes mueve Su carro Dios ligero y ...
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Términos y frases comunes
abrasa ageno agora agua alegre alma amor ánimo Apolo aquesta ARCISIO ardiente ayrado ayre bella belleza BERALDO Betis blando cancion cansado canto castellano cielo ciervo cion CLARENIO color composicion contento coplas corazon cruel cuidado cuitada Dafne deja DELICIO demas despues diccion dichoso divino dolor dulce dura ÉGLOGA engaño escondido escritor espanto estilo eterno Fernando de Herrera fiero Filis flores FRANCISCO DE RIOJA frio fuego fuerza Garcilaso gloria gusto habia halla hermosa hermosura Herrera huye imitacion imitar ingenio jamas lágrimas lengua lenguage llanto lleno llorando Lope de Vega Magüer mano MELANCIO mira monte muerte mundo murió Náyades nieve ninfa noche ojos ondas paso pastor pecho pena pensamientos Petrarca poema poesía poeta poético prado pura quejas quiero rayo ribera rosa ROSANIO selvas siglo sombra SONETO suelo Sulco talento tambien tenia tierno Tirsi triste umbrosa ventura verde versificacion versos viento Virgilio viva vuelo yerba zampoña
Pasajes populares
Página 62 - ¡Qué descansada vida la del que huye el mundanal ruido, y sigue la escondida senda, por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido ! Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio moro, en jaspes sustentado.
Página 69 - ¿Es más que un breve punto el bajo y torpe suelo, comparado a aqueste gran trasunto do vive mejorado lo que es, lo que será, lo que ha pasado?
Página 35 - ... mundo cubre, de do viene el temor que nos espanta y la medrosa forma en que se ofrece aquello que la noche nos encubre, hasta que el sol descubre su luz pura y hermosa: tal es la tenebrosa noche de tu partir, en que he quedado de sombra y de temor atormentado, hasta que muerte el tiempo determine que a ver el deseado sol de tu clara vista me encamine.
Página 16 - Nuestras vidas son los ríos que van a dar en la mar, que es el morir; allí van los señoríos derechos a se acabar y consumir: allí los ríos caudales, allí los otros medianos y más chicos; allegados son iguales los que viven por sus manos y los ricos.
Página 180 - Tal genio o religión fuerza la mente De la vecina gente, Que refiere admirada Que en la noche callada Una voz triste se oye que, llorando, Cayó Itálica dice, y lastimosa, Eco reclama Itálica...
Página 63 - Despiértenme las aves con su cantar sabroso no aprendido; no los cuidados graves de que es siempre seguido el que al ajeno arbitrio está atenido. Vivir quiero conmigo, gozar quiero del bien que debo al cielo, a solas sin testigo, libre de amor, de celo, de odio, de esperanzas, de recelo.
Página 267 - Buscando mis amores, iré por esos montes y riberas; ni cogeré las flores, ni temeré las fieras, y pasaré los fuertes y fronteras.
Página 36 - Tengo una parte aquí de tus cabellos, Elisa, envueltos en un blanco paño, que nunca de mi seno se me apartan: descójolos, y de un dolor tamaño enternecerme siento, que sobre ellos nunca mis ojos de llorar se hartan. Sin que de allí se partan, con suspiros calientes, más que la llama ardientes, los enjugo del llanto, y de consuno...
Página 25 - El dulce lamentar de dos pastores, Salicio juntamente y Nemoroso, he de cantar, sus quejas imitando; cuyas ovejas al cantar sabroso estaban muy atentas, los amores, de pacer olvidadas, escuchando.
Página 269 - Mi Amado, las montañas, los valles solitarios nemorosos, las ínsulas extrañas, los ríos sonorosos, el silbo de los aires amorosos. La noche sosegada en par de los levantes de la aurora, la música callada, la soledad sonora, la cena, que recrea y enamora.