tancias que ha manifestado son tan estraordinarias que obliguen á acceder á ella; si la suspension debe o puede hacerse de todos, ó solo de algunos articulos que ha citado; el tiempo de la suspension; la provincia para donde deba decretarse, etc. Asi mi opinion es que el CONGREso encargue à una comision, que à mi entender pudiera ser la de arreglo de tribunales, que examine con urgencia este negocio en vista de la esposicion que ha hecho el secretario de Gracia y Justicia, y de lo que verbalmente ha indicado, que constará de las notas taquigráficas, y presente á V. M. su dictámen..

Escrupulosos hasta en los momentos del mayor peligro, los liberales sacrificaron esta vez, como en todas las ocasiones, los intereses de partido á la integridad de la ley. El CONGRESO, antes que acudir al castigo de los rebeldes, se conformó con las indicaciones del Sr. Argüelles y aprobó la siguiente proposicion del mismo diputado: Que la comision de arreglo de tribunales, examinando la propuesta de la Regencia, y tomando en consideracion lo espuesto verbalmente por el secretario de Gracia y Justicia, informe al CONGRESO lo que tenga por conveniente, con toda la urgencia que exige la gravedad de este negocio.»>

La sesion del 24 comenzó con la lectura del manifiesto que dirigia la Regencia á los españoles, esponiendo las causas de la separacion del general Ballesteros, jefe del 4. ejército y capitan general de Andalucia. Procedióse á la renovacion mensual de cargos y fueron elegidos don Francisco Ciscar, don Francisco Calella y don José Maria Couto presidente, vice-presidente y secretario.

El 25 no se reunieron los diputados porque era preciso solemnizar el natalicio del Crucificado, del hijo de Dios, venido al mundo entre las pajas de un pesebre para destruir la tiranía.

El 26 reanudaron las CORTES sus trabajos, y la comision de arreglo de tribunales presentó su dictámen, acerca de

la autorizacion que habia pedido la Regencia para suspender los efectos de varios articulos constitucionales. El senor Calatrava, como individuo de la comision leyó el dictámen, y en él recapituló las doctrinas mas puras de derecho comun y de órden constitucional, para concluir: &que se conteste á la Regencia del reino que por ahora no re sultan datos suficientes para que V. Ma se considere en el caso de usar de la facultad qué le concede eb artículo 509 de la constitucion, ni de suspender ninguna de las for malidades prescritas por la misma para el arresto de los delincuentes. Que tampoco viene V. M. en dispensar el decreto de 28 de octubre último; y que si la naturaleza de la causa, ó los motivos reservados que tiene el Gobierno, exigen que la continuacion de los procedimientos se encargue à una persona distinta de los jueces respectivos de primera instancia, las CORTES autorizan á S. A. para que nombre la que sea de su confianza, y no esté impedida de obtener semejante comisión, á fin de que continúe el sumario hasta completarlo y ponerlo en estado de recibir las confesiones, en cuyo caso se pasará la causa al juez de primera instancia competente para que la sustancie y determine conforme à derecho. Quedó aprobado el dictámen, dando á la Regencia una leccion de derecho constitucional, que todos los gobiernos debieran aprender y observar. Cuando hay regularidad y pureza en la administracion pública, los tribunales ordinarios bastan para la represion y castigo de todos los delitos. El poder ejecutivo tiene, en tal caso, los medios suficientes para conservar la tranquilidad y la paz interior de los estados.

La llegada del duque de Ciudad-Rodrigo puso á las CónTES en el caso de nombrar el dia 27 una comision de su seno que pasase á felicitarle por sus triunfos sobre los franceses. ob 965 omsla um 1999ldeles 70 aciqis El dia 29 se dió cuenta de la ausencia repentina del se ñor Huerta, que el tribunal de CORTES notició al CONGRE so, porque como fiscal debiera ser inmediatamente reets plazado. La causa formada al señorb Ros, daba motiTOMO IV.

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vo á sus cómplices para ausentarse como enfermos.

El 50 se presentó el duque de Ciudad-Rodrigo para devolver á las CORTES la felicitacion, y tomando asiento entre los diputados, dijo lo siguiente: «Señor, no me habria yo resuelto a solicitar el permiso de ofrecer personalmente mis respetos á este augusto CONGRESO, á no haberme animado á ello la honra que V. M. me ha dispensado el dia 27 de este, enviando una diputacion á felicitarme de mi llegada á esta ciudad: distincion que no debo atribuir sino á la parcialidad con que en todas ocasiones ha mirado V. M. los servicios que la suerte me ha proporcionado hacer à la nacion española.-Dignese, pues V. M. permitirme manifestar mis reconocimientos por este honor, y por las diferentes muestras de favor y confianza que he recibido de las CORTES, y asegurarle que todos mis esfuerzos se dirigirán al apoyo de la justa é importante causa que la España está defendiendo.—No detendré con nuevas protestaciones à V. M., ni ocuparé el tiempo de un CONGRESO, de cuya conducta, sábia, prudente y firme depende, con el auxilio de la Providencia, el feliz éxito de todos nuestros conatos.-No solo, señor, los españoles tienen puesta la vista eu V. M., sino que á todo el mundo importa el dichoso fin de su vigoroso empeño en salvar la España de la ruina y destruccion general, y en establecer en esta monarquia un sistema fundado en justos prin cipios que promuevan y aseguren la prosperidad de todos los ciudadanos, y la grandeza de la nacion española.» -Los ingleses, aun los reputados como gefes del partido realista, emplean en todas ocasiones el lenguaje de los principios fecundos de justicia y de mejoramiento. El duque de Ciudad-Rodrigo, el lord Wellington, reconocia que las CORTES estaban en el camino de los buenos principios para establecer un sistema capaz de promover y asegurar las mejoras en todos los ramos de la administra cion española.—La contestacion del presidente-con disgusto lo consignamos-no correspondió á la dignidad del CONGRESO En vez de hacerse cargo de alguna parte de las

reformas sancionadas, el señor Ciscar solo habló de batallas y de conquistas. Desgraciada condicion la de nuestros hombres politicos, para quienes la gloria militar es la primera de las glorias!

Entramos en el último periodo de existencia de las CónTES generales y estraordinarias, à quienes son deudores los Borbones y la nacion española de su libertad, de sn independencia y de sus mas sábias leyes. La agitacion de los últimos meses de su legislatura no fué motivo de esterilidad para el pais, antes al contrario, multiplicándose los diputados se trataron muy graves y fecundas cuestiones, aunque la reaccion las enterró antes de nacer bajo la losa de la arbitrariedad.

Continuáronse los trabajos el 1." á pesar de la solemnidad del dia, y el 2 quedó aprobado el decreto sobre repartimiento de terrenos baldios y realengos, con algunas modificaciones, que nada quitaron de mérito al proyecto que hemos copiado en su lugar correspondiente, presentado por la ilustrada comision de agricultura.

Los dias siguientes se trataron asuntos importantes de gobierno, y el 8 se aprobó el decreto facultando à la Regencia para el nombramiento de los generales de ejército y provincia, y poniendo á sus órdenes á todos los empleados del orden civil en cuanto fuere concerniente á los asuntos de guerra. La discusion del proyecto sobre el tribunal de la Inquisicion, fué objeto del resto de los trabajos de este dia. (1)

(1) Todo lo referente á este asunto lo publicaremos a la conclusion de la obra.

Lo mismo sucedió en los siguientes, en que despachados los negocios ordinarios se habló con la mayor circunspeccion y aplomo de los tribunales de la Inquisicion, siendo contrarios à ella mas de cien diputados. A sesenta ascendió solo el número de los que sostenian su compatibilidad constitucional.-El dia 24 fueron elegidos presidente, vice-presidente y secretario los señores Zumalacárregui, Calatrava y Rodriguez Bahamonde.

Todavia se estaba discutiendo la ley sobre tribunales protectores de la religion, que deberian reemplazar al de la suprimida Inquisicion, cuando el 27 se leyó un escrito de los oficiales del Estado Mayor general del ejército presentada por el conde de Toreno, felicitando á las Cortes por haber suprimido aquel horrible establecimiento. Los firmantes de la esposicion se regocijaban y adquirian nuevos brios al verse con la libre facultad de ejercer sus derechos, sin que una mano oculta pudiera derramar impunemente el llanto y la desolacion en el seno de sus familias, bajo respetables pretestos, con mengua de la justicia y de la religion santa que profesamos.»

En el mismo sentido dirigieron otras corporaciones, en los dias siguientes, su adhesion á la trascendental y reclamada abolicion del tribunal, en mal hora instituido en España. La verdadera religion, que es el sentimiento del bien, grabado en el corazon del hombre por la Divinidad, no podia consentir por mas tiempo que la tiranía se ejerciese en su santo nombre por indignos ministros del Altar, que manchaban con sangre humana.

1813.-FEBRERO.

El dia 1.° se leyó por la comision de Hacienda un proyecto de decreto, con sus declaraciones preliminares, para que la nacion se incautase y administrase los bienes pertenecientes à la suprimida Inquisicion.-Despues siguió