Imágenes de páginas
PDF
EPUB

se

dumbre popular, y se reduce todo al número de dos, tres ó cuatro peronas públicas, correspondientes á cada clase y cámara: es decir que se sustituyen las clases á los individuos, y el interes de los órdenes al interes de cada particular; y entonces las cámaras por sí, van mútuamente á la mano en sus diferentes pretensiones: ninguna aspira á lo que no es razonable, y todas tienen que venir en fin á conciliaciones equitativas; y el Rey sobre todo queda en una situacion, en que es casi imposible que tenga que chocar con el cuerpo legislativo,

Sin embargo porqué en fuerza de algunas circunstancias singulares podria llegar á acalecer, que las cámaras se reuniesen en algun asunto contra el monarca; y que de su reunion le amenazase algun riesgo ; ó que ellas se encendiesen y ecsasperasen entre sí, por la divergencia de sus opiniones ó intereses se ha tenido tambien por necesario, conceder al Rey la facultad de disolverlas cuando lo juzgue oportuno, y cortar asi en las deliberaciones, el órden ó empeño del momento. Y esta precaucion es tan necesaria, que la falta de ella

en las revoluciones de Francia é Inglaterra fué una de las causas mas eficaces del trastorno de la monarquía.

Hasta la convocacion periódica de las cámaras, é independiente de la voluntad del Rey, se ha tenido por espuesta en el pais mas maestro en esta materia; porque la esperiencia ha acreditado, que esta circunstancia trasforma en una oposision permanente lo que no debe ser sino un freno pasagero, y que insensiblemente da un carácter agresivo á la fuerza, que no debe servir sino para dirigir ó estorbar. Los españoles antiguos adaptaron estas mismas ideas: el Rey convocaba las córtes cuando lo creia oportuno asi en Castilla como en Aragon, fuese espontáneamente ó á peticion del reino, y la convocacion se miraba como una gracia.

Sin embargo ninguna de estas prerogativas ha sido otorgada al Rey por la Constitucion; y asi es preciso convenir en que, aun siguiendo los principios de los defensores de la so❤ beranía popular y del gobierno representativo, está sin defensa alguna para hacer frente al poder democrático de las córtes. La máquina ese

tá apoyada en dos resortes opuestos y sumamente desiguales, y el resultado necesario debe ser un desconcierto espantoso desde que se ponga en movimiento, y en breve una destruccion universal. Y tras esto, recogeremos las piezas para montarla de otro modo, y la entregaremos á nuestros descendientes, para que se entretengan en hacer nuevos esperimentos, sino renuncian á nuestras ideas, y detestan nuestras pasiones.

XV. REFLECSION.

Se ha reflecsionado lo que corresponde al art. 181?, Las córtes, dice, deberán escluit

,, de la sucesion (á la corona) aquella persona

وو

وو

6 personas que sean incapaces para gobernar,

„ó que hayan hecho cosa, porque merezcan » perder la corona." ¿Porque se dice perder la corona, y no perder el derecho á la sucesion á la corona? La corona no puede perderse sino despues de adquirida. ¿Podria correr este riesgo el que la posea sin embargo de estar declarada su persona sagrada é inviolable?

Pero contrayéndonos á las demas ¿en que se ha de fundar la incapacidad? No se dice nada. ¿Y porque cosas puede merecer un habiente derecho á la corona perder este derecho? tampoco se dice. Las causas pues de incapacidad y los hechos que merezcan el castigo de perder el derecho á la sucesion á la corona, serán la voluntad de las córtes, y sola su voluntad. En el hecho este artículo viene á hacer poco menos que electiva la corona, especialmente entre las líneas y personas de la estirpe real.

No se olvide, que las cortes se componen de un cuerpo solo, y que este cuerpo es popular esencialmente. ¿Necesitará entre nosotros, de que Aristides sea reo de enormes delitos para condenarlo al ostracismo? Otro pueblo tuvo por bastante causa las virtudes que atrajeron á este héroe el sobre nombre de justo; y este mismo pueblo culto y sabio, y modelo en el dia de los pueblos sabios y cultos, no tuvo hombre grande, á quien no llevase al patibulo, ó á quien por lo menos no arrojase de sí. Y si el pueblo de Atenas trataba de asegurar la humillacion de sus grandes hombres, y no

perdonarles el homenage de hacerle la corte dejará de ser alagueño para nosotros asegu➡ rar el obsequio, el cortejo, y como quien dice las ante-salas de todo un árbol genealógico de personas reales? El pueblo y lo popular son mas que parecidos en todas partes y en todos tiempos. Si el orgullo, si la faccion, si la cor rupcion dominaron en Atenas, puede sentarse que dominarán en todos los gobiernos populares. Y hasta el dia en cual han dejado de dominar?

Las cortes pues han tratado por medio de este artículo de ejercer una magistratura sobre todas las personas de la familia real, descono➡ cida en todos los gobiernos monárquicos; magistratura, que puede ser el cebo mas poderoso por poner en movimiento la ambicion de todos los habientes derecho á la corona, é introducir una corrupcion suma en el mismo cuerpo legislativo; y que puede ocasionar turbulencias, y divisiones intestinas de la mayor monta, guerras estrangeras, y todos los males, que trae consigo la eleccion de las coronas, y acaso mayores: porque no es probable que los inmediatos sucesores que se vean separados

« AnteriorContinuar »