Colección de autores españoles, Volumen22F.A.Brockhaus, 1874 |
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Términos y frases comunes
abismo acento ADOLFO BERRO adoro agitado aire alegre aliento alma amigo amor ángel ardiente ardor aroma aura aurora AZUA bella blando bosque brilla calma cándida canto céfiro celestial cielo consuelo contemplar corazon CRISOSTOMO LAFINUR danza delicioso Despues divina dolor duerme dulce encanto entónces escita escucha esperanza estrellas éter eterno exhala feliz fiero firmamento flores frente fuego furor GERTRUDIS G gloria hamaca Henriqueta hermosa hijo huracan ilusion impía inmensa inocente JOSÉ FERNANDEZ MADRID JOSÉ MARIA HEREDIA JOSÉ RIVERA INDARTE labios lanza levanta libro del destino linda llanto lleno llora luna luz fantástica mano MANUEL NAVARRETE mece mira mis ojos misterioso mortal muerte mundo Nació noche nubes ondas oscura patria pecho placer providencia pura rayo rosa ruego Salud seno serena siente silencio sombra sonrisa sublime suelo sueño suspiro tambien tierno tierra tirano tormenta triste trono tumba velo ventura viento vírgen vuelo WITTSTEIN
Pasajes populares
Página 98 - á tí la suerte El alma libre, generosa, fuerte, Guardó mas digno objeto, mas sublime; Viene, te ve, se asombra, El mezquino deleite menosprecia, Y aun se siente elevar cuando te nombra. Vi monstruos execrables Omnipotente Dios! En otros climas Blasfemando tu nombre sacrosanto, Sembrar error y fanatismo impío, Los campos inundar en sangre y llanto,
Página 16 - seduce; el juicio engaña; En los zarzales del camino deja Alguna cosa cada cual; la oveja Su blanca lana, el hombre su virtud. Vé. hija mia, á rezar por mí, al cielo Pocas palabras dirigir te baste: «Piedad, Señor, al hombre que criaste Eres Grandeza; eres Bondad,
Página 97 - furioso, Al retumbar sobre mi frente el rayo, Palpitando gocé: vi al oceano Azotado por austro proceloso. Combatir mi bajel, y ante mis plantas Vórtice hirviente abrir, y amé el peligro. Mas, del mar la fiereza En mi alma no produjo La profunda
Página 289 - Sino mozas como azúcar, Hombres, eso era un milagro; Y al punto en varias tropillas Se vinieron acercando Los escueleros mayores Cada uno con sus muchachos, Con banderas de la patria Ocupando un trecho largo : Llegaron á la pirami Y al dir el sol coloreando, Y asomando una puntita....
Página 97 - abrir, y amé el peligro. Mas, del mar la fiereza En mi alma no produjo La profunda impresion que tu grandeza, Sereno corres, majestuoso, y luego En ásperos peñascos quebrantado, Te abalanzas violento, arrebatado, Como el destino irresistible y ciego. ¿Qué voz humana describir podría De
Página 18 - IV. Hija, reza tambien por los que cubre La soporosa piedra de la tumba, Profunda sima adonde se derrumba' La turba de los hombres mil á mil: Abismo en que se mezcla polvo á polvo, Y pueblo á pueblo; cual se ve á la hoja De que al añoso bosque abril despoja, Mezclar las suyas otro y otro abril.
Página 14 - Vé á rezar, hija mia. Ya es la hora De la conciencia y del pensar profundo: Cesó el trabajo afanador, y al mundo La sombra va á colgar su pabellon. Sacude el polvo el árbol del camino, Al soplo de la noche;
Página 20 - me será que vengas Y para mí la eterna paz implores, Y en la desnuda losa esparzas plores, Simple tributo de amorosa fe. ¿Perdonarás á mi enemiga estrella Si disipadas fueron una á una Las que mecieren tu mullida cuna Esperanzas de alegre porvenir? Sí, le perdonarás; y mi memoria Te arrancará una lágrima, un suspiro
Página 139 - DIAMELA. Dióme un día una bella porteña, Que en mi senda pusiera el destino, Una flor cuyo aroma divino Llena el alma de dulce embriaguez; Me la dió con sonrisa halagüeña, Matizada de puros sonrojos, Y bajando hechicera los ojos, Incapaces de engaño y doblez. En silencio y absorto toméla Como don misterioso del cielo, Que
Página 98 - falta á tu destino, Ni otra corona que el agreste pino A tu terrible majestad conviene. La palma y mirto y delicada rosa, Muelle placer inspiran y ocio blando En frivolo jardin: á tí la suerte