Debe atribuirse, como ya he dicho, la anterior carta al Prepósito Provincial de la Compañía de Jesús en el Perú: y siendo ella del año de 1626, es probable la escribiese el P. Juan de Frías Herrán, ó su inmediato sucesor en el cargo Gonzalo de Lira. Pero ya sea de uno ú otro, tiene la impor tancia de ser documento de carácter oficial, escrito luego que muriera el Padre Menacho, y que nos revela el concepto que de él formaron sus cohermanos en la religión. El cronista Juan Anello Oliva se ocupó del mismo Padre en un trabajo inédito hasta hoy; y después le prodigan elogios los escritores, de dentro y fuera de la Compañía, que trataron de los peruanos ilustres por su ciencia y eminentes virtudes. Prescindiendo de otros, bastará citar á Córdova Salinas (1), Pinelo (2), Leonardo Peñafiel (3), Montalvo (4), Echave (5), Irrisarri (6) y Francisco de Rotalde (7). Pero voy á copiar los elogios en verso de Fr. Adrián Alecio y Peralta, hechos conforme al gusto de su época. "Menacho tanto ha de ser, que solo tú sin asombros podrás este monstruo ver, jayán para cuyos ombros es niño el mayor saber" (8). "Allá se ve el Menacho venerado, Tomás, sino primero, transfundido: Angel sublime de ángel derivado Que hará el estudio culto enardecido (9). El P. Alonso Zamora, que hizo á Menacho su compatriota, sin ninguna razóu ó pretexto plausible, nos dice (10): "De esta ciudad de Santa Fé llevó (el Ilmo. Arzobispo "Lobo Guerrero) entre su familia al V. Padre Juan Pérez (1) Crónica: I, III, c. IV, pág. 156. (3) De Virtute fidei divinæ. - Lugduni, 1673 fol: pp, 284 y 430. Madrid, 1715: pág. 33. (7) Elogium Sapientissimi Patris Joannis Pérez Menacho e Provincia Peruana Societatis Jesu. -Ms. 4? (8) El Angélico: f. 178. (9) Lima fundada: canto VII, octava 240. (10) Historia de la Provincia de San Antonino del Nuevo Reino de Granada: I. IV, cap. XV, p. 365. "Menacho, criollo de esta ciudad de Santa Fé, y que en la "de Lima entró en la Compañía de Jesús, en que floreció co"mo un asombro de virtud y sabiduría. Supo de memoria "los Concilios y todas las obras de nuestro Angélico Doctor "Santo Tomás, á quien siempre estudiaba de rodillas. Ja"más estudió cosa que se le olvidase. Con ser tan sabio fué “más humilde, estimándose por un idiota. Murió virgen purísimo; y declararon sus confesores que no había perdi"do la gracia bautismal ". En el primer Mercurio Peruano (11) publicó, con el seudónimo de Hesperióphylo, D. José Rosi y Rubí, Vicepresidente de la sociedad "Amantes de Lima", una Noticia histórica de la vida del Ven. Padre Juan Pérez Menacho, extractada de un manuscrito perteneciente á un archivo antiguo: cuyo trabajo coincide con la Carta de edificación que he publicado. Sin embargo, conviene fijarse en algunos puntos de esa Noticia. Rosi dice, que el P. Menacho nació en 1565, y no en 1564, como se puso por nota en la Carta de edificación: ligera diferencia de un año, que se explica por el modo de computar los 61 que, á su muerte, tenía Menacho; y que manifiesta que, para precisar su edad y el nombre de sus padres, no se vió la partida de bautismo. Yo llenaré ese vacío, publicándola tal como se encuentra en el segundo libro de bautismos de la parroquia de la Catedral, hoy del Sagrario: libro correspondiente á los años de 1556 á 1578. La partida dice así (folio 91): "A lunes cinco días del mes de março de 1565 años baptizo el Licenciado don bartholome martinez arcediano desta sancta yglesia a Juan hijo legitimo de Steban peres y de ysabel menacho su legitima muger fueron padrinos alonso de Valencia y Costança Diaz su muger y domingo de aspetia y Ana Cohur su muger. (Firmada) — Rodrigo prieto ". Desde que la partida no expresa el número de días del bautizado, puede creérsele nacido el mismo día 5 ó el anterior; y que se le impusiese el nombre de Juan por devoción, ó por celebrarse á San Juan de Dios el 8 del propio mes de mar (11) Núm. 11; del 3 de marzo 1791, pág. 157. zo. Como quiera que sea, llama la atención la circunstancia de administrar el sacramento, no el cura ó su ínter sino el arcediano: lo que acredita que se trataba de una familia distinguida. Se afirma por Rosi, que á los diez años sabía Menacho todo el Salterio, ó sean los ciento cincuenta salmos de David, y no sólo los Penitenciales, según refiere la Carta de edificación. Encontramos otro dato curioso sobre la talla del P. Menacho. "Su estatura era prodigiosa: á los siete años tenía dos varas y sesma de alto, de modo que parecía tener quince; y á veinte y cinco creció en tal proporción, que no se halló persona alguna en todo el Reyno, á quien no excediese, como Saul, del hombro para arriba. " Nos parece digno de reproducir este pasaje: "A los últimos meses de su lectura de Artes, cumplió la edad canónica para ordenarse, y sacerdote ya volvió al noviciado á su tercera probación. Acabada esta pasó á leer teología en la ciudad del Cuzco: de allí volvió á su patria á leer en el colegio de San Pablo, y á petición de la Real Universidad entró á servir en ella la cátedra de Prima, sucediendo á su maestro el Padre Esteban de Avila el año de 1601. La solicitud de este ilustre y sabio cuerpo iba corroborada con un decreto del Excmo. señor marqués de Salinas, en cuya presencia y en a de la real audiencia, cabildo eclesiástico y secular, nobleza, c'austro y doctores subió el P. Menacho á la cátedra,desde donde pidió al rector que mandase á uno de los secretarios abrir el libro que le pareciese de las tres sumas de la teología del angélico Santo Tomás, que estaban puestos por delante, y que registrase la question y artículo que ofrecía aquella repentina suerte. Hecha esta diligencia repitió ad pedem litteræ todo el artículo fortuitamente designado, y leyó sobre él una hora entera con admiración de todo el auditorio. " Hesperióphylo concluye así: "Asistieron á su entierro el Ilmo. señor arzobispo, los dos cabildos, los religiosos y toda la nobleza de esta ciudad. Las lágrimas de los pobres, los elogios de los sabios, el sentimiento de todo el Reyno fueron su panegírico fúnebre y su triunfo ". Sin embargo de que aparece como discípulo del P. Este. van de Avila, á quien llamó el vulgo "el doctor de los doctores", Menacho fue uno de los que aprobó (abril 25 de 1607) su celebrada obra De censuris ecclesiasticis; cuya aprobación aparece impresa en el mismo libro, antes que las de los padres Andrés Hernández y Juan Perlin. Las obras que en nuestra biblioteca nacional existen del P. Menacho son: 1a TRACTATUS DE EXCOMUNICATIONE, TAM IN COMMUNI QUAM IN PARTICULARI 4? 454 h. (214 h. 240 hnc.) y Este tomo, el primero de los del Padre Menacho que estaban listos para la estampa, fué dedicado, en 1o de junio de 1631, al cardenal Ludovico Ludovisi, por el Provincial de la Compañía de Jesús en Lima Nicolás Mastrillo Duran; y se le aprobó ese mismo año con encomios por los teólogos censores Francisco de Contreras, Ignacio de Arbieto, Juan de Cárdenas y Francisco de Figueroa. 2a COMMENTARIA IN I. PARTEM DIVI THOMAE A QUAESTIONE I USQUE AD XIII. — Limæ, 1597: 4o 163 h. 3 COMMENTARIA I P.-QUAEST. XIII AD XXVI. — 43-233 h. y 2 hnc. Hay otro tomo Ms. que es el duplicado del anterior; que tiene 168 hnc., y que comprende las cuestiones XIV á XXV. 4a COMMENTARIA I P-A. QUAEST. XLIV AD QUAEST. LXIV. - Limæ, 1609; 4o-720 h. y 5 hnc. 5a COMMENTARIA IN I". II QUAEST. I. AD V. — 1609, 4o 131 h. Este volumen es copia, hecha con mejor letra, menos abreviaturas y más corrección, que otro libro original que lleva el título De beatitudine, por ser la materia á que se contraen las cuestiones referidas. — 4o 149 h. y 16 hnc. 6a COMMENTARIA IN I. II. QUEST. LV AD LXXXIX. — 4o 248 h. 7a DE VITIIS ET PECCATIS. COMMENTARIA IN II SECUN DAE. QUEST. LXXI AD LXXXIX. 4o 180 h. Hay otro tomo titulado De vitiis et peccatis. 4o 180 h.: y que sólo comprende las cuestiones LXXI á LXXXIX. 8a COMMENTARIA IN III PARTEM,QUAEST. IV AD XXVI. 4o 289 h. y 61 hnc. 9a DE SACRAMENTIS IN GENERE. 12a DE RESTITUTIONE. - 89 46 hnc. y 62 h. A estas obras hay que agregar las que menciona el Pa. SCIENTIA ERRONEA. De redditiBUS ECCLESIASTICIS. - DE PRIVILEGIIS SOCIETATIS JESU. — 1 t. - DE EISDEM PRIVILEGIIS, CUM OPUSCULIS VARIARUM MATE- Merece también recordarse un TRATADO BREVE SOBRE LA Este último tratado lo escribió Menacho con motivo de la consulta que le hizo el arzobispo de Charcas D. Alonso de Peralta. Solórzano, juez competente, dice que el se conformó en las más cosas con las resoluciones de tan grave y "erudi- tísimo" Padre; y añade que su tratado era completo y bien En cuanto á las doctrinas del P. Menacho sobre las ma- terias más arduas, se necesitaría, para juzgarlas, un prolijo -- (12) Pinelo. · Bibliotheca: título XXI, t. II, col. 818. |