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canones de nuestra Nacion publicados por el bibliotecário Gonzalez, y al viaje literario de Villanueva. Pero es sobre todo notable falta, permanezcan sin traducir los immensos manuscritos árabes mencionados por Casiri en su biblioteca. La historia de Cardone, la de Conde, la biblioteca de Herbelot, y las Historias posteriores escritas por franceses é ingleses, son diminutas y superficiales, y no presentan sino la parte esterior por decirlo asi y menos interesante de la civilizacion árabe, Immensos servicios ha prestado hoi el erudito orientalista español Don Pascual Gayangos con la traducion al inglés de la Historia de las Dinastías Mahometanas de Ahmed Mohamed. Formando esta obra, mas bien que una historia, un estracto de otras historias árabes, ofrece mayor interés que cualquiera otra aislada, por buena que fuese. Ella es un cuadro de las divisiones geográficas, producciones, estado de la agricultura y ártes, gobierno y funcionarios públicos, poetas y escritores célebres del imperio árabe, con noticias mui apreciables sobre las causas que influyeron en la conquista.

Es lamentable la rapidez, con que el historiador recorre sus objetos, y la falta de descripcion de costumbres, y de la tendencia de las obras poéticas, metafísicas, legales, teolójicas y científicas de los Arabes. Y como en España, segun los conocimientos que tenemos del Imperio árabe, se modificaron tanto entre los Moros por efecto del clima y de su relacion con los cristianos, las doctrinas ascéticas, relijiosas y políticas que constituyen el fondo de la civilizacion oriental y mahometana, se hace tanto mas notable este vacío. Por otra parte; no solo conservaron los árabes la literatura Griega y Latina, é hicieron grandes adelantos en la agricultura, en las artes, en la medicina, en la botánica, y en las ciencias exactas, si que ajitáronse por sus Alimes y Alfaquies las mas elevadas cuestiones metafísicas, y no fueron tan indiferentes, como vulgarmente se cree, á las políticas y sociales. Por ello es de un gran interés para la literatura de Europa y lo es en especial para la historia de España, el que se cultiven entre nosotros las lenguas orientales y que se traduzcan los manuscritos citados por Casiri. Esta empresa supe

rior á los esfuerzos de un particular es propia del gobierno español y de la académia de la historia ausiliada por él mismo. Oprobioso es, señores, que mientras se fundan en Europa sociedades asiáticas, y comisiones de traducciones orientales, mientras todos los gobiernos ilustrados se esfuerzan á porfia por recojer manuscritos, enriquecer sus bibliotecas, y publicar las obras inéditas, permanezcan nuestros archivos y bibliotecas, despues de haber estado entregadas al vandalismo y rapacidad estranjera fomentada por especuladores nacionales, permanezcan, repito, sin llamar la atencion del gobierno español. Vergonzoso es tambien, que la biblioteca de París, el Museo Británico, y las bibliotecas de particulares de Inglaterra, posean hoi nuestras mejores preciosidades, y que los jóvenes de algun talento reciban la proteccion de otros gobiernos para publicaciones interesantes. Desahogo es este que el público me tolerará. Enemigo de censurar los gobiernos, y menos en nuestro pais; donde todos mueren de consuncion y por impotencia para gobernar, muéveme á prorrumpir en estas quejas, el que tan criminal

indiferencia no solo dá lugar á la rapacidad estranjera y al despojo de nuestras bibliotecas, si que á formar de nosotros un juicio deshonroso, y á hacer de éste pais calificaciones, que todo buen español debe rechazar con indignacion y con altiva severidad. Pero volviendo al objeto, que dejó suspendido este episodio, es una falta notable para nuestra historia, no ecsistir una coleccion completa y auténtica de los fueros municipales, otra de los historiadores orijinales de España, y otra de los ordenamientos de nuestros reyes. Mas hai sobre todo necesidad de entresacar, coordinar y ecsaminar nuestros immensos materiales históricos á la luz de la razon, de la imparcialidad y de los adelantos filosóficos hechos en este siglo.

Al hablar de esta suerte, no se crea, que yo llenaré cumplidamente este último objeto, Edad mas madura, juicio mas profundo, conocimientos mas estensos y sobre todo mayor abundancia de materiales que los que yo actualmente poseo, son indispensables para desempeñar medianamente tan importante trabajo. Por ello reclamo la benevolencia de mis amigos, y la induljencia de

parte de los que no me conocen. Muchos de los hombres eminentes que me escuchan y que ocuparian este lugar mas dignamente, con mas justicia que yo, no deben ver en mí sino esfuerzos de un jóven, impotentes sin duda para la vasta empresa que abrazó, pero encaminados á un fin nóble y patriótico y que debe alentar á personas mas capaces é instruidas. Mi ánimo, señores, es despertar el gusto y el amor á la historia, escitar al trabajo y á los estudios profundos á la juvented española, calumniada hoi y que responderá un dia con hechos á esas calumnias, propagar el entusiasmo por la ciencia y por todo lo que nuestra nacion ha producido grande é ilustre en politica, en lejislacion, en literatura y administracion. No solo los concilios de Toledo, nuestras instituciones municipales, las ordenanzas marítimas de Barcelona, el código de las partidas, la constitucion de Aragon, y los sábios fueros de Valencia, prueban, señores, la precocidad de nuestro desarrollo político, si que las obras de Luis Vivés, de Marquez, Mariana, Navarrete, Moncada, Osorio, Martinez de la Mata y Saavedra Fa

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