Anales históricos de la revolucion de la América latina: acompañados de los documentos en su apoyo. Desde el año 1808 hasta el reconocimiento de la independencia de ese extenso continente, Volumen1

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A. Durand, 1864
 

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Página 211 - Desde este momento, españoles americanos, os veis elevados a la dignidad de hombres libres: no sois ya los mismos que antes encorvados bajo un yugo mucho más duro, mientras más distantes estabais del centro del poder; mirados con indiferencia, vejados por la codicia y destruidos por la ignorancia. Tened presente que al pronunciar o al escribir el nombre del que ha de venir a representaros en el Congreso Nacional vuestros destinos ya no dependen ni de los ministros, ni de los virreyes, ni de los...
Página 197 - En la muy noble y muy leal ciudad de la Santísima Trinidad, puerto de Santa María de Buenos Aires, á 25 de mayo de 1810, los señores del excmo.
Página 37 - ... que no llena los fines para que fueron instituidos los gobiernos, creemos que no podemos ni debemos conservar los lazos que nos ligaban al gobierno de España, y que, como todos los pueblos del mundo, estamos libres y autorizados para no depender de otra autoridad que la nuestra, y tomar entre las potencias de la tierra, el puesto igual que el Ser Supremo y la naturaleza nos asignan ya que nos llama la sucesión de los acontecimientos humanos y nuestro propio bien y utilidad.
Página 34 - Cuantos Borbones concurrieron a las inválidas estipulaciones de Bayona, abandonando el territorio español contra la voluntad de los pueblos, faltaron, despreciaron y hollaron el deber sagrado que contrajeron con los españoles de ambos mundos, cuando con su sangre y sus tesoros los colocaron en el trono, a despecho de la casa de Austria. Por esta conducta quedaron inhábiles e incapaces de gobernar a un pueblo libre, a quien entregaron como un rebaño de esclavos.
Página 38 - España, o de los que se dicen o dijeren sus apoderados o representantes, y que como tal Estado libre e independiente, tiene un pleno poder para darse la forma de gobierno que sea conforme a la voluntad general de sus pueblos...
Página 37 - NOSOTROS los representantes de las Provincias Unidas de Venezuela, poniendo por testigo al SER SUPREMO de la justicia de nuestro proceder, y de la rectitud de nuestras intenciones ; implorando sus divinos y celestiales auxilios, y ratificándole en el momento en que nacemos a la dignidad, que su providencia nos restituye el deseo de vivir, y morir libres : creyendo y defendiendo la santa católica y apostólica religión de Jesucristo, como el primero de nuestros deberes.
Página 35 - ... nuestra justicia, han procurado los gobiernos de España desacreditar todos nuestros esfuerzos, declarando criminales y sellando con la infamia, el cadalso y la confiscación, todas las tentativas que, en diversas épocas, han hecho algunos americanos para la felicidad de su país...
Página 35 - ... la calumnia, se nos nombran apoderados contra nuestra expresa voluntad, para que en sus Cortes dispongan arbitrariamente de nuestros intereses, bajo el influjo y la fuerza de nuestros enemigos.
Página 323 - Los autos mismos manifestarán a Vuestra Excelencia, que su voluntad decidida es unirse con esa ciudad y demás confederadas, no sólo para conservar una recíproca amistad, buena armonía, comercio y correspondencia; sino también para formar una sociedad fundada en principios de justicia, de equidad y de igualdad.
Página 36 - ... miramos y declaramos como amigos nuestros, compañeros de nuestra suerte y partícipes de nuestra felicidad, a los que unidos con nosotros por los vínculos de la sangre, la lengua y la religión, han sufrido los mismos males en el anterior orden; siempre que, reconociendo nuestra absoluta Independencia de él y de toda otra...

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