NO D PAVCARTAMBO Sa 17 de ancho, se diuide en 2 territorios el 1° is es de temperamo bario y saludable y produce as legumbres, y hortalisas, ui Ganade muior ea, como volatil, El 2o es derde las tres cruces Fina con los Chunchos, de temperamento produce mucha coca,en log consiste su maderas, tablas, quartones, y batear; estos ba_ hal temperamento, é infectos ponsortavas eriar son frequentes, y para contenerlos n piquede de hombres armados con elre Jus Cerros son abundantes no solo devno นq Asogue ninguna se trabaja al presente. racaron algunos marcas de plata del mi de los cinco Partidos de la Intendencia (1). El Partido de Paucarcolla lo describe con quince poblaciones, sus anexos y las diferentes razas de sus habitantes. El Partido de Chucuito con trece poblaciones, especificando en cada una de ellas sus habitantes, iglesias, etc. El Partido de Lampa con veintisiete poblaciones y los mismos detalles. El Partido de Azángaro con dieciséis poblaciones. Y por último, el Partido de Carabaya con veinticinco poblaciones, que es indispensable enumerarlas para los fines de este alegato. Tales son: Sandia, cabecera del Partido y residencia del Subdelegado. Cuyucuyo, pueblo de indios. Patambuco y Chaquisimas, minerales de indios. Quiyaca, pueblo de indios. Sina y San Juan del Oro, minerales de indios. Coasa, pueblo de indios. Crucero y Usicayos, pueblos de indios. Aporoma, Alpacato, Limba y Chacani, minerales de indios, anexos de Para. Ayapata, pueblo de indios, curato con una Iglesia. (1) Anexo N.o 96. Ituata, mineral de indios, anexo de Aya pata. Macusani, pueblo de indios, curato con una Iglesia. Oyachea, Corani y Ucuntaya, minerales de indios. Esta es la descripción oficial y auténtica más detallada que se conoce del Partido de Carabaya. Al primer golpe de vista se notará que entre los anexos no figuran Saqui ni San Cristóbal, que el Subdelegado Goiburú les atribuye á la Subdelegación de Apolobamba. En conclusión, podemos afirmar sin vacilación alguna, que la Intendencia de Puno, al tiempo de su segregación de la Audiencia de Charcas, estuvo prolijamente descrita, con sus Partidos, villas, pueblos, anexos y minerales y por sus límites desde el punto del Desaguadero del lago de Titicaca hasta el Partido de Quispicanchi de la Intendencia de Cuzco. Por consiguiente, habiendo tenido lugar la segregación dentro de las condiciones y límites citados, el derecho peruano en la actualidad no puede pasar de ellos. No concluiremos este capítulo, sin hacer presente que la Intendencia del Cuzco, que era la base de la Audiencia de este mismo nombre, al tiempo de la erección de ésta, no sufrió ninguna alteración en los límites de sus pro |