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Por los antecedentes que acabamos de exponer, se comprende que la adopción de la línea Este-Oeste, del Madera al Yavary, tuvo su proceso y su historia. Las Cancillerías fueron proyectándola con recíprocas proposiciones y modificaciones, hasta que quedó adoptada en la forma sencilla y bien definida que registran los tratados de 1750 y 1777. Con esta línea los soberanos de España y de Portugal delimitaron ó tuvieron intención de delimitar, como que fué la realidad, la Provincia de Charcas con las posesiones portuguesas, por cuanto el distrito de la Audiencia de Charcas, llegando según las Leyes de Indias, hasta el Mar del Norte y línea de separación con el Brasil, era la que se encontraba comprometida por esta parte en la definición de fronteras.

Debemos advertir aquí, que el Virreinato del Perú, en este año de 1750, colindaba con el Brasil sólo por las fronteras del distrito de la Audiencia de Charcas y por ningún otro punto más, mucho menos por las del distrito de la Audiencia de Lima. En esta fecha, el territorio de la Audiencia de Quito, que por a parte de las Misiones de Maynas llegaba hasta Ucayali, estaba separado del Virreinato del Perú ó Lima y agregado definitivamente al de Santa Fe ó Nueva Granada. Extendiéndose aquellas Misiones á lo largo

del río Yavary y hasta San Miguel de Conibos, 40 leguas más al Sur de las vertientes del Yavary, el Brasil colindaba desde la extremidad occidental de la línea Este-Oeste hacia el Norte, con las Misiones de Maynas, territorio de la Audiencia de Quito del Virreinato de Santa Fe. Es así también como los territorios de Charcas y de Quito eran colindantes y se tocaban en la zona del Yavary, dejando de un lado, y muy alejado, el territorio de la Audiencia de Lima.

CAPÍTULO CUARTO

Desde el tratado de 1750 hasta la erección provisional del Virreinato de Buenos Aires en 1.o de Agosto de 1776. Ordenes Reales para el mayor progreso de las Misiones de Apolobamba y defensa de las fronteras sobre los ríos Paraguay, Guaporé, Mamoré y Madera. Nuevos avances y usurpaciones de los portugueses.

I

El Tratado de 1750 se llevó á ejecución en parte, con la colocación de marcos hasta las cabeceras del río Paraguay, en la boca del Jaurú. En estas operaciones intervino la Audiencia de Charcas, suministrando los fondos y elementos necesarios.

En la parte del río Yavary debían intervenir para la ejecución de dicho tratado el Gobernador de Maynas y el P. Provincial de las Misiones de Quito, bajo la autoridad de la Audiencia de Quito, la que dió las órdenes para el viaje y recepción de los Comisarios demarcadores. Con todo, esta frontera no llegó á delimitarse, ni las operaciones tuvieron principio por inconvenientes suscitados por la comisión portuguesa.

Entre tanto, el Portugal á pesar de haber

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