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de manifestar su amor al Ilmo., Exmo. y Venerable Beñor D. Juan de Palafox y Mendoza, convidan á todos los ingenios de esta ciudad, para que con el afecto que han profesado siempre á su Prelado, lo manifiesten glosando las quintillas y décima que anteceden, y esperan que el domingo á las cuatro de la tarde se presenten en su general (1) las que con tan plausible motivo se hubieran compuesto, para que leídas y calificadas se premie al que mejor glose las quintillas, con cincuenta pesos por cada una, y con cien á quien mejor glosare la décima, teniendo todos el gusto de aplaudir en los mismos Colegios al que, siendo su fundador, es el decoro de esta capital y Obispado.

En el expresado día domingo, después de haberse celebrado en acción de gracias misa cantada y sermón en los Reales Colegios de San Pedro y San Juan que, conforme al Santo Concilio de Trento, fundó el V. señor, se procedió por la tarde á la revista de las glosas, que se leyeron en pública voz en el general espacioso de los dichos Colegios, en presencia de un numeroso distinguido concurso de sacerdotes religiosos y personas nobles, interpelando á la lección de cada glosa un breve y armonioso concierto de música. Hubo piezas muy delicadas, en medio de haber sido tan poco el tiempo que se dió para discurrir, y se puso fin á esta función bien

(1) En las universidades, seminarios, etc., aula 6 pieza donde se enseñaban las ciencias.

entrada la noche, estando muy iluminado el general, vistosamente adornada la cátedra, y un primoroso retrato del V. señor bajo un magnífico dosel.

Las poesías que merecieron el premio prometido y el aviso que se dió al público de la sentencia á favor de ellas, es todo como se sige:

Noticia al Público.

Habiéndose visto y cotejado todas las glosas que los ingenios de esta ciudad hicieron y presentaron, de las dos quintillas y décima en loor de nuestro Ilmo. Exmo. y V. Siervo de Dios el Sr. D. JUAN DE PALAFOX Y MENDOZA, se ha sentenciado que entre las muchas que ha habido muy especiales, las que merecen y han conseguido el premio prometido son las de los sujetos siguientes:

En la glosa de la primera quintilla, que comienza: Vivo y muerto fué infamado, se ha dado sentencia á favor de la que hizo el M. R. P. Fr. José Muñoz, lector de vísperas de Sagrada Teología, en su Colegio Real y Pontificio y más antiguo de San Luis, de la Sagrada Orden de Predicadores, en atención á la profundidad, solidez, claridad, naturalidad y consecuencia, que desde el principio hasta el fin contiene dicha glosa.

En la de la segunda quintilla, que comienza: Tú, que al amparo no acudes, se ha sentenciado á favor de cierta glosa que empieza ¡Qué caso, señor! y está firmada con este nombre: Fr. Bartolomé Cés

pedes, respecto á la exquisita y singular viveza y especial novedad y energía que en ella usa su autor, y pues se ignora quien es ÉSTE, por haberse averiguado que en los conventos de esta ciudad no hay religioso alguno del nombre y apellido expresados, se previene que el que haya sido su autor acuda al Sr. Regente y Rector de estos colegios, quien le entregará el premio señalado de cincuenta pesos, haciendo constar primeramente, por señales ciertas, que él fué el que hizo dicha glosa.

Entre las muchas y primorosas que se presentaron de la décima, cuyo principio es: Firme la Puebla ha clamado, se ha sentenciado á favor de la que compuso y presentó D. Manuel del Castillo, dependiente de la Real Aduana de esta ciudad, no sólo por la especialidad que tiene en haber glosado en cada una de sus cinco décimas dos pies de la décima propuesta,-el primero al fin de la primera cuarteta, y el segundo al fin de cada décima,-ni sólo por haberse sujetado al acróstico que dice: EL V. SR. PALAFOX; sino también por la mucha oportunidad y propiedad de que usa en los grandes elogios que propone del V. SIERVO DE DIOS, los que va aumen· tando con particular primor en toda la glosa, y esto con un modo muy claro y natural. Asimismo, porque este sujeto glosó las dos quintillas con gran igualdad, sosteniéndose y no decayendo en cosa alguna del primor con que glosó la décima, se le hace el honor de imprimir dichas dos glosas, juntas con la premiada.

Previénese también que otras varias de las especiales que se presentaron, han de ser premiadas extraordinariamente.

Y todo sirva para mayor honra y gloria de Dios y de nuestro tan amado y dignísimo fundador y padre, el ya dicho V. Siervo del Señor.

Glosa que de la primera quintilla del cartel hizo el M. R. P. Fray José Muñoz, de la Sagrada Orden de Predicadores, lector de vísperas de Sagrada Teología en este su Colegio Real, Pontificio y más antiguo de San Luis, y que habiendo estudiado en estos insignes colegios de San Pedro y San Juan, fundados por el V. SEÑOR, y teniendo ya decreto del Ilmo. Sr. Obispo para tomar posesión de una beca en ellos, se entró en la religión de Santo Domingo y obtuvo dicha beca un hermano suyo. El referido padre lector cedió el premio para gastos de la causa de la beatificación del mismo V. SEÑOR,

Justo es que mi afición pía
Celebre con alborozo

En día de tanto gozo

El gozo de tanto día;

Y más que por dicha mía
Al VENERABLE SEÑOR,
Debo todo aquel honor
Que poseo, y así es justo

Manifieste aquí mi gusto,
Mi afecto, placer y amor.
Verdadero alumno,
Fiel, agradecido,
Alabanzas doy,
Víctores repito.

A este pensil, sin desvío,
En quien plácemes se ven,
Doy rendido el parabién,
Pues fué y es para bien mío;
En esto me empleo y porfío,
Deseando con grande anhelo
Nos llegue presto el consuelo
De ver á nuestro Prelado
Por la Iglesia declarado
Entre los santos del Cielo.

Sus glorias aplauda
Su noble colegio,

Y Dios nos conceda
El que le adoremos.

A éste, pues, ufano
Tributo este obsequio,
Como propio suyo,
Pues á él se lo debo.

Para que conozca El que le obedezco, Sírvanme de prueba

Los siguientes versos:

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