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es de nuevo elegido diputado por la provincia de Tacna y su mayor empeño fue tratar de la devolución al Perú de las provincias cautivas.

A más de estos datos, su autobiografía contiene, muchísimos otros pormenores de sumo interés, que descubren intimidades de Modesto Basadre y Chocano a quien le cupo vida larga, laboriosa, aventurera y dinámica, que se extingue a comienzos del presente siglo, el 13 de agosto de 1905. Entre las múltiples tareas a que se dedicó, la del historiador tiene singular importancia para nosotros. Es autor de Diez Años de Historia Política del Perú. Narró la década de 1834 a 1844, en artículos originarios salidos en el diario La Patria entre los años del 77 y 78 del pasado siglo y que, la Biblioteca Repúbilca reunió en un volumen, salido en 1953.

Diez

Comienza el libro, desde la anarquía del régimen de Orbegozo y de Salaverry y concluye con la derrota de Vivanco en Carmen Alto. años de inquietud política, de agitación revolucionaria, con un desborde de acciones militares, de batallas de importancia, traiciones, cambios de poder fruto de enconado tejido de intrigas partidaristas, encabezadas por muchos jefes de facción, sus tenientes y seguidores, insurgentes en diversas comarcas, en donde a más de las rivalidades de los cabecillas, ensanchaban las discordias los antegonismos regionales.

La década que estudió Basadre, dibuja al detalle el cuadro de la época, lleno de episodios y pormenores valiosísimos para el mejor conocimiento de esos años, cuya característica fundamental es un trágico desgobierno. No sólo posee valor político y militar su libro; otros conocimientos aporta: informes de carácter geológico; temas de minas y perspectivas de tipo económico.

M. M.

ENRIQUE BENITES

(1834-1917)

Nació en Lima el año 1834. Desde su juventud cultivó con notorio entusiasmo la geografía y la historia, dedicándose con perseverancia ejemplar a la enseñanza de estas disciplinas, siendo profesor de ellas en el Colegio de Labarthe y en el antiguo Convictorio Peruano. Como fruto de su labor en este orden, dejó escritos varios textos sobre geografía física, política y astronómica, que fueron adoptados por numerosos planteles escolares de los que funcioinaban en la República. También sirvió con eficiencia comprobada en la administración del Estado, desempeñándose con la más absoluta honorabilidad en el Ministerio de Gobierno y Obras Públicas, alcanzando sus ascensos grado a grado, y por orden riguroso hasta ocupar la Dirección de Gobierno, a la que llevó muchas ponencias que redundaron en beneficio de determinadas leyes y disposiciones administrativas.

Perteneció a la Sociedad Geográfica de Lima, al Ateneo y al Insti

tuto Histórico del Perú, siendo uno de sus miembros fundadores. En el ramo de la pedagogía sobresalió en primera línea, dejando su nombre muy bien puesto en los colegios en que enseñara y en las comisiones de instrucción de que formara parte y a las que llevó el aliento de su palabra persuasiva y serena.

Cumplió también don Enrique Benites sus deberes de ciudadano patriota y ejemplar cuando la guerra con Chile, concurriendo a las batallas de San Juan y Miraflores libradas el 13 y 15 de Enero de 1881, y salvando con riesgo su vida los documentos relacionados con aquellos hechos de armas.

Con paciencia verdaderamente benedictina, Benites formó una valiosísima colección de recortes de periódicos, que suman varios volúmenes y que versan todos ellos, sobre las incidencias múltiples ocurridas durante el conflicto del Pacífico desde los momentos de su iniciación hasta su término. Ordenados cronológicamente tales documentos, ellos constituyen una severa fuente de consulta, y reposan hoy debidamente conservados en el archivo de nuestra Cancillería.

Rodeado del respeto y consideración generales, falleció el señor Benites en esta capital el 4 de febrero de 1917 y a la avanzada edad de 83 años.

E. S. C.

MARCO AURELIO CABERO

(1854-1934)

Fue un acucioso investigador de la historia patria, habiendo dejado como fruto de su labor tesonera y fecunda, importantes trabajos, basados todos en documentos de inapreciable valor, que había compulsado durante su permanencia en España, adonde se dirigiera para indagar en los archivos peninsulares sobre los datos que necesitaba para elaborar sus magníficos y bien ponderados estudios, sobre la vida y hechos de determinados conquistadores del Perú.

Por referencias del señor Guillermo Tálleri Barúa, distinguido publicista especializado en el ramo de la genealogía, se sabe que Cabero había nacido en Trujillo el 25 de abril de 1854, siendo sus padres don Miguel Cabero y Cabero y doña Rosenda Vega y Guerra.

Muy poco es lo que se sabe de él con respecto a sus primeros años, por carencia de datos, pero se colige que sus aficiones por el cultivo de las disciplinas históricas fueron notorias y arrancaban desde la época de su juventud, si se tiene en cuenta que había acumulado abundante material en sustentación de sus trabajos eruditos sobre el Capitán Juan Delgadillo, Juan Roldán de Avila y El Corregimiento de Saña o el problema histórico de la fundación de Trujillo, que se registraron en la Re

vista Histórica, correspondiente al bienio 1907-1908, y que el autor de estas líneas reprodujo en el Apéndice al Diccionario Histórico-biográfico del Perú, por el General Mendiburu, tomos 2o y 4o, páginas 42 y 215 respectivamente.

Por la factura de estos escritos hay que convenir en que Cabero estudió muy a fondo los orígenes lejanos de linajudas familias de España, de Trujillo y Lima, habiendo llegado a acumular innúmera cantidad de documentos que fueron por él debidamente discriminados y en los que hizo lujo de una erudición poco común. Don Carlos A. Romero, historiador de prestigio continental y que conoció muy de cerca a Cabero, sostenía que en materia de heráldica, no había quien lo superase, habiendo sido con Enrique Torres Saldamando uno de los más afamados cultivadores de la genealogía bajo todos sus aspectos.

Parece que la holgada situación económica de que Cabero disfrutara en su mocedad, vino a menos, y por ello es que en el bienio 1906-1907, consiguió un cargo de Gobierno, cual fué el de administrador de la aduana fluvial de Iquitos, en el que no permaneció mucho tiempo, pues a poco se trasladó a Chile donde continuó sus estudios históricos con perseverancia ejemplar, quedando inédito todo aquel enorme materia que había acumulado. En Santiago, investigó en los archivos oficiales y particulares, logrando vincularse por esta circunstancia con prominentes intelectuales, entre los cuales no podía faltar don José Toribio Medina, según afirmación del doctor Genaro Herrera en la biografía que publicara de Cabero, en hojas sueltas, aunque en forma incompleta.

En la República del Sur, Marco Aurelio Cabero contrajo matrimonio con doña María Higinia Martínez de Lefeuvre y Rivera, habiendo dejado descendencia que vive en la actualidad. No se conoce con exactitud la fecha de su fallecimiento ocurrida en Chile.

E. S. C.

MARIANO H. CORNEJO
(1867-1942)

Mariano H. Cornejo nació en Puno. Hizo sus estudios escolares en aquella ciudad, y luego pasó a las Universidades de Arequipa y Lima. En ésta obtuvo sucesivamente los grados de Bachiller en Letras (11-XII1886) y Doctor en Letras (11-XI-1887), Bachiller en Jurisprudencia (27-VI-1887) y Abogado (23-XI-1889). Retorna a su ciudad natal para ejercer su profesión, y, favorecido por el voto popular, ocupa en 1892 la alcaldía de Puno y la diputación por la provincia de Azángaro. Durante la legislatura de aquel año ocupa la pro-secretaría de la Cámara de Diputados, y a través de sus intervenciones defiende la libertad religiosa, la libertad de prensa y la integridad territorial. Promueve la censura al

Ministro de Gobierno, por haber clausurado algunos periódicos de la oposición; y al producirse el golpe de estado de 1894 se ve compelido a abandonar Lima. Se establece en Tacna, donde edita La Voz del Sur, y luego pasa a La Paz. Allí contribuye a organizar fuerzas para defender el orden legal, y con ellas respalda el movimiento revolucionario en Puno. En 1895 es elegido diputado por su provincia natal, y en su Cámara aboga en favor de las juntas departamentales, el matrimonio civil y el establecimiento del habeas corpus. En 1896 opta el grado de doctor en la Facutad de Ciencias Políticas y Administrativas de la Universidad Mayor de San Marcos, presentando para tal efecto una tesis sobre El gobierno parlamentario, que fué publicada en los Anales Universitarios; y habiéndose creado el curso de Sociología en la Facultad de Letras, se le designa para regentarla. En 1897 se incorpora al Partido Demócrata, y la provincia de Puno lo reelige diputado. La cámara respectiva lo elige en 1901, para ocupar la presidencia. Y al año siguiente la provincia de Sandia le confía un nuevo mandato legislativo.

Al iniciarse el año 1904 es acreditado como Ministro Plenipotenciario ante el gobierno de Ecuador; y, en armonía con la política preconizada a la sazón por nuestro país, suscribe convenios para someter al arbitraje del Comisario Regio que nombrase España las reclamaciones motivadas por el incidente de Torre Causano, y para renovar al monarca la petición formulada en 1887 a fin de que encargase a un Comisario Regio el estudio del litigio limítrofe peruano-ecuatoriano en los archivos de las cancillerías de ambos países. En 1905 fué acreditado como Enviado Extraordinario y Ministro Pienipotenciario ante la corte de España, y durante el desempeño de su misión se le encargó que redactase el alegato del Perú en la disputa entablada con Ecuador por la cuestión de límites. Emprendió viaje el 13 de marzo, en compañía de don Ramón Menéndez Pidal, que había visitado Lima con la investidura de Comisario Regio; Honorato Vásquez, Ministro Plenipotenciario de Ecuador; y José Santos Chocano, secretario de la misión peruana. El 4 de julio presentó sus credenciales ante el rey Alfonso XIII. Y en 1905 inició la publicación de la documentada Memoria que redactara en colaboración con Felipe de Osma, para defender ante el real árbitro los derechos del Perú.

En 1906 concurrió a la Tercera Conferencia Internacional Americana, efectuada en Río de Janeiro. Retornó a España, a fin de atender a las etapas finales del litigio con Ecuador, y presentó sucesivamente un Memorandum final y un Memorandum adicional, en 1908 y 1909. Concluída su misión, reasumió el dictado de la cátedra de Sociología en la Facultad de Letras de la Universidad Mayor de San Marcos, el año 1911. En 1912 fué elegido senador por el departamento de Puno. El 4 de julio de 1919 integró como Ministro de Gobierno, el gabinete constituído por Augusto B. Leguía. Presidió la Asamblea Nacional Constituyente que redactó la Constitución promulgada aquel mismo año, y cuyas fundamentales reformas fueron inspiradas por el propio Mariano H. Cornejo.

Elegido senador por el departamento de Puno, presidió su Cámara en 1920. Y el 8 de marzo de 1921 viajó a Francia para asumir la representación del Perú ante el gobierno de ese país y ante la Liga de las Naciones, cargos que retuvo, con algunas alternativas, hasta 1930. Murió en 1942.

Aparte de numerosos artículos y discursos que sólo parcialmente recogió en volúmenes, Mariano H. Cornejo publicó: El equilibrio de los continentes (1932), en ediciones francesas, españolas e inglesas; La lutte pour la paix (1934), con un prólogo de Paul Valery; y, muy especialmente, su fundamental Sociología general (2 volúmenes, 1908-1910). Favoreció la reforma de los procedimientos penales, promoviendo la adopción del juzgamiento por jurados. Fué miembro del Ateneo de Lima; correspondiente de las Reales Academias de la Lengua, de la Historia, y de Ciencias Morales y Políticas; y honorario de la Real Academia de Legislación y de la Real Sociedad Geográfica.

A. T.

PEDRO EMILIO DANCUART GALUP

(1847-1911)

Personalidad eminentemente dinámica fué la de Pedro Emilio Dancuart, nacido en Lima el 19 de octubre de 1847 y fallecido en la misma, el 5 de diciembre de 1911. Fueron sus padres, el ingeniero alemán Dn. Enrique Dancuart, natural de Hamburgo, casado con la limeña Mercedes Galup. Su educación la recibió primero, en el Seminario Conciliar de Santo Toribio y luego, en la Escuela Normal Central.

Entre sus múltiples actividades, se hallan: la del periodismo; la carrera administrativa, al servicio del Estado; la del político y la de la investigación histórica. Muy joven lo tenemos en la redacción de El Peruano y en la de El Heraldo, hasta 1869, año que sale de la capital hacia el Cuzco para allí ejercer la Secretaría de la Prefectura de ese departamento. En 1874, pasa como Cajero Fiscal de Apurímac y después con igual categoría ejerce la de Huancavelica.

Durante la guerra con Chile, concurrió a los combates de la plaza del Callao contra la escuadra enemiga; con el carácter de Coronel. Fué jefe de las reservas que se organizaron en el departamento de Huancavelica y acompañó al General Cáceres, en calidad de Secretario, durante las célebres campañas de la Breña. Cáceres que conocía su actividad e inteligencia, lo nombró "Visitador General de las Oficinas de Hacienda" con facultades extraordinarias, para que proporcionase recursos a la causa de la Regeneración Nacional y supo en esa difícil misión, buscar nuevos arbitrios, en los graves días en que se hallaba la patria quebrada en su integridad.

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